El U.S. Rifle M-1 Garand es una de las armas más emblemáticas de la historia. Su decisiva intervención en los principales conflictos de nuestro mundo marca su auténtico valor histórico. Un fusil inmortal, cargado de recuerdos, cuya leyenda se acrecienta cada día.Del M-1 Garand, el General Patton llegó a decir que era “el mayor instrumento bélico jamás creado”.
El M-1 Garand vino a sustituir al veterano fusil de cerrojo Springfield M1903 cal .30-06, del que tomó prestado su calibre y su larga bayoneta. Este histórico fusil toma su nombre del ingeniero John C. Garand, de la Springfiel Armory, quien lo diseña impulsado por el deseo de la Jefatura del Estado Mayor del Ejército, personificada por el general Douglas MacArthur, de dotar al ejército norteamericano de un fusil semiautomático y no automático, como se ha dicho en muchas publicaciones, y que fue pionero en cualquier ejército regular de una manera generalizada, amén de otros semiautomáticos que le precedieron en un escasísimo número .
Así las cosas, fue en los primeros años de la década de 1920 cuando arrancaron los estudios para diseñar el Garand. Sin embargo, no sería hasta inicios de enero de 1936 cuando el rifle Garand es adoptado como fusil reglamentario del Ejército, tras superar sus oportunas pruebas de selección contra otros contrincantes, como el BAR (Browning Automatic Rifle) o el Pedersen T2 E1. Posteriormente, iniciada ya la II Guerra Mundial, al Garand le surgieron otros competidores como el Johnson M41 de la Marlin Firearms, el cual comenzó a fabricarse de manera estandarizada, aunque ralentizada y en cierta forma recelosa, tras unos ligeros y oportunos ajustes.
El bautismo de fuego del M-1 Garand llegó durante la Segunda Guerra Mundial. Concretamente, en las primeras batallas del Pacífico contra los japoneses y en el desembarco de Guadalcanal por tropas de Marines, siendo muy pronto reconocidas y alabadas sus bondades y excelencias. Cuando en 1950 cesó su producción, habían sido puestos en servicio nada menos que 5.500.000 unidades de estos fusiles, siendo sobre todo la Sprigfield Armory y la Winchester Repeating Arms Company, las principales fabricantes de este elevado número. Posteriormente, durante la Guerra de Corea, en la que también intervino este veterano fusil, su producción se subcontrató con la Harrison & Richardson de Worchester, y con la International Harvester Co. de Chicago. El M-1 Garand posee gran valor entre los coleccionistas.Desde 1950 y hasta 1961, se autorizó la producción de unas 100.000 unidades del Garand a las casas Breda y Beretta (Gardone-Val-Trompia) para que surtieran de fusiles a Italia y a otros países de la recién creada OTAN, e incluso para exportarlos a Dinamarca e Indonesia.
El M-1 Garand destacó en todos los frentes en los que estuvo implicado, sin importar latitudes: América del sur, Europa, Asia, norte de África, el frío ártico o las zonas tropicales del suroeste del Pacífico.
En 1956 fue aprobada la substitución del Garand por el M-14, un rifle con mejoras en la alimentación y en el automatismo del disparo (ráfaga), así como cambios en el calibrado del cartucho. En cualquier caso, la acción y los mecanismos eran prácticamente los mismos. En resumidas cuentas, el Garand M-1 podría ser considerado como un arma de transición entre el fusil de cerrojo y el fusil de asalto, pero todo un acierto para su época.
El M-1 Garand Fusil o rifle (en el argot anglosajón) norteamericano es accionado mediante toma de gases, después del disparo, con acerrojamiento por cierre giratorio. La toma de gases, situada próxima a la boca de fuego, se comunica con el cilindro de gases a través de un orificio practicado en el cañón, que a modo de pistón sobre un muelle compresor, desplaza la varilla de actuación que va unida al cierre forzándole a iniciar el ciclo de carga.
Está alimentado por un cargador o clip de 8 cartuchos que se introduce y fija en el compartimiento alimentador. Cuando se efectúa el último disparo, el clip es expulsado automáticamente del arma, quedando el cierre bloqueado en su posición más retrasada y demandando recarga.
Uno de los mitos más extendidos sobre este rifle afirmaba que los peines no se podían expulsar de otro modo que no fuese disparando todos los cartuchos; esto es, sin embargo, falso ya que los peines llenos o semillenos pueden expulsarse con relativa facilidad del rifle. Este mito nació porque en situaciones de combate era preferible disparar todos los catuchos e insertar un nuevo peine con una sola mano, que sacar un peine que aun contuviese algún cartucho,lo cual supondría el uso de ambas,operación lenta y peligrosa. El M-1 Garand vino a sustituir al veterano fusil de cerrojo Springfield M1903 cal .30-06, del que tomó prestado su calibre y su larga bayoneta. Este histórico fusil toma su nombre del ingeniero John C. Garand, de la Springfiel Armory, quien lo diseña impulsado por el deseo de la Jefatura del Estado Mayor del Ejército, personificada por el general Douglas MacArthur, de dotar al ejército norteamericano de un fusil semiautomático y no automático, como se ha dicho en muchas publicaciones, y que fue pionero en cualquier ejército regular de una manera generalizada, amén de otros semiautomáticos que le precedieron en un escasísimo número .
El bautismo de fuego del M-1 Garand llegó durante la Segunda Guerra Mundial. Concretamente, en las primeras batallas del Pacífico contra los japoneses y en el desembarco de Guadalcanal por tropas de Marines, siendo muy pronto reconocidas y alabadas sus bondades y excelencias. Cuando en 1950 cesó su producción, habían sido puestos en servicio nada menos que 5.500.000 unidades de estos fusiles, siendo sobre todo la Sprigfield Armory y la Winchester Repeating Arms Company, las principales fabricantes de este elevado número. Posteriormente, durante la Guerra de Corea, en la que también intervino este veterano fusil, su producción se subcontrató con la Harrison & Richardson de Worchester, y con la International Harvester Co. de Chicago. El M-1 Garand posee gran valor entre los coleccionistas.Desde 1950 y hasta 1961, se autorizó la producción de unas 100.000 unidades del Garand a las casas Breda y Beretta (Gardone-Val-Trompia) para que surtieran de fusiles a Italia y a otros países de la recién creada OTAN, e incluso para exportarlos a Dinamarca e Indonesia.
El M-1 Garand destacó en todos los frentes en los que estuvo implicado, sin importar latitudes: América del sur, Europa, Asia, norte de África, el frío ártico o las zonas tropicales del suroeste del Pacífico.
En 1956 fue aprobada la substitución del Garand por el M-14, un rifle con mejoras en la alimentación y en el automatismo del disparo (ráfaga), así como cambios en el calibrado del cartucho. En cualquier caso, la acción y los mecanismos eran prácticamente los mismos. En resumidas cuentas, el Garand M-1 podría ser considerado como un arma de transición entre el fusil de cerrojo y el fusil de asalto, pero todo un acierto para su época.
El M-1 Garand Fusil o rifle (en el argot anglosajón) norteamericano es accionado mediante toma de gases, después del disparo, con acerrojamiento por cierre giratorio. La toma de gases, situada próxima a la boca de fuego, se comunica con el cilindro de gases a través de un orificio practicado en el cañón, que a modo de pistón sobre un muelle compresor, desplaza la varilla de actuación que va unida al cierre forzándole a iniciar el ciclo de carga.
Está alimentado por un cargador o clip de 8 cartuchos que se introduce y fija en el compartimiento alimentador. Cuando se efectúa el último disparo, el clip es expulsado automáticamente del arma, quedando el cierre bloqueado en su posición más retrasada y demandando recarga.
El M1 solía producir un ruido muy característico cuando se quedaba sin munición, ya que expulsaba el peine vacío. Los soldados alemanes llegaron a saber que cuando los rifles estadounidenses hacían ese ruido era porque se les habían acabado los cartuchos,aprovechando la ocasión para salir.Muy pronto los estadounidenses idearon una forma muy sencilla de imitar el sonido del peine expulsado,engañando así a muchos alemanes que salían para disparar, pero se encontraban con una bala esperándolos.